Y si no pasa nada?


 
Okay, llegados a este punto tal vez no comprendan mucho, como yo tampoco lo hago. Pero creo que cuando uno se embarca en una aventura que Dios organiza, la lógica no es nuestra compañera.

Donde me quede... Ahh cierto, la oración! Si, recuerdo ese día claramente. Después de tres años repletos de emocionantes respuestas de Dios y específicos pasajes de la Biblia confirmando mi sueño, llegue a preguntarme cuando se harían todos esas cosas algo real en mi vida. ¿Y si al final no pasaba nada? Mi meta era mas que solo orar...pero pasaban los dias y mi corazon ya no sabia que hacer, así que impulsivamente hice una oración pequeña pero cargada de sentimiento, y dije:
 "Dios, yo oraré siempre por Ucrania y eso lo sabes, pero quiero ir, y no se cuando eso sera posible. Por eso, si tu quieres que vaya, se claro, pues tu no eres un Dios de confusión y yo no me quiero equivocar."
Salí de mi cuarto, esperando que Dios en su momento respondiera, pero con la ansiedad de tener la respuesta lo mas pronto, pues, a final de mi ultimo año de estudio tenia muchas incógnitas sobre mi futuro.
Saben,sin importar donde fuera, la conversación numero uno en top ranking de tópicos a tratar era: "¿qué vas a hacer después de esto?". Y,  sinceramente, no tenia una idea clara de lo que Dios quería, por eso me era tan difícil esperar.
Cuando el día estaba finalizando, tome mi teléfono, con la idea de llamar a mis padres y contestar algún que otro mensaje, cuando en el buzón de entrada un nombre llamo mi atención. Una persona   (la cual  no nombrare, por que eso no se hace en Internet ;P ) con un breve : "por que no vienes a Ucrania a ayudarnos en verano?", cambio mi día por completo, me puse a saltar de alegría, cerré el mensaje y fui por todas partes contándole a todos que Dios me había respondido. Una fecha, una posibilidad, alguien dándome una oportunidad. La gracia de Dios era tan grande en un mensaje tan pequeño. Reconocía que la invitación era espontanea, no era algo oficial, pero para mi fue algo puntual y obvio, por que Dios estaba hablando, dándome razones para seguir creyendo.
 Pasaron los días, y recordé que con toda la emoción del momento ni había respondido el correo. En mi respuesta deje en claro que esto era una señal  que Dios me regalaba.
Si me preguntan por que hice lo siguiente, no tengo excusa, tengo problemas, eso seguro. Cualquier persona normal después de un suceso así, hubiera empezado a planear y hubiera trabajado por esto. Pero  yo agradecí a Dios por su respuesta, pero lo deje ahí. En los siguientes días, confirme que volvía a hacer un año mas en el instituto y, planifique mi vida alrededor de esto.
Terminó el año, volví a mi casa y en verano, viaje a Ecuador con mi familia a visitar a los parientes y visitar las iglesias. Y en cada parada, se abría una puerta diferente, que ofrecían ministerios y servicios que eran lo que yo buscaba. En un lugar se trataba de trabajar con obras de teatro evangelisticas, en otro el objetivo era servir con niños,etc. y mi corazón estaba dividido. Yo ya había decidido hacer un año mas de estudio, y ahora aparecían tantas opciones diferentes y únicas. Por lo cual en el final de mi viaje, mi mejor amiga , usada por el Señor, agarró un cuadernito, y juntas, analizamos las ofertas, todas, incluida Ucrania. Y después de un debate infructuoso, decidimos dar un paso de fe.
Oramos juntas y leyendo la Biblia nos encontramos con la historia de el pueblo de Israel ,cuando cruzaron el mar rojo. Dios ya  había preparado desde la fundación del mundo el camino debajo de las aguas para que ellos pasaran, Israel por fe debía caminar por ahí, sabiendo que Dios los llevaba a un lugar mejor, y en el caso de Josue, a la tierra prometida.Yo sabia que Dios me estaba guiando, pero debía dar ese primer paso de fe, el cuál seria mojar mis pies en todas las opciones, y donde se abrieran las aguas, ese seria el lugar.
No es una sorpresa que el único camino seco y transitable fuera "UCRANIA". Para cuando llegue a esta  obvia conclusión me encontraba en marzo, faltando solo 4 meses para la fecha que desde Ucrania habían propuesto para mi visita.
Mi trabajo comenzó con todo el entusiasmo, y cada vez que averiguaba algo mas, la certeza crecía.
Para entrar a Ucrania, por ser Argentina, el único papel que necesitaba tener, era mi pasaporte. No necesitaba vacunas, ni algún tipo de tramite complicado. Todo estaba listo. Pero mi mayor barrera era mi pasaje, sabia que era algo que no se escapaba de las manos de Dios, pero humanamente era imposible,por eso solo podía venir de Dios.
En casa busque trabajo, no encontré nada,menos uno que se adaptara al ministerio que actualmente estaba desarrollando (en otro momento les contare sobre eso, pues es muy interesante), y aunque tenia oportunidad de vender algunas cosas, nunca fui muy buena con las ventas. Pero Dios que tiene tanto sentido del humor uso lo que mas me costaba. Comencé vendiendo carteras, y me fue muy bien por que una amiga me ayudo a venderlas (Gracias amiga, no digo tu nombre por que como dije antes, en Internet eso no se hace). Pero cuando se acabaron estas, aun faltaba muchísima cantidad de dinero, asi que incursione en el mundo de la pastelería,y junto a mi madre, una hermana de la iglesia y las adolesccentes, empeze mi negocio ambulante a domicilio itinerante y no constante de venta de Muffins, donnuts y maicenitas caseras.
Créanme, me iba muy mal. Era mucho trabajo y nada de ganancia. Me estresaba y agotaba, y a veces no lograba vender todo, pero fue una de las experiencias mas enriquecedoras. No gane mucho con esta empresa, pero impulso mi ministerio con las chicas, reforzó mi relación con ellas y me enseño que es necesario el esfuerzo.
Y entendí que el plan de Dios no era que con mi trabajo juntara el dinero, era que aprendiera que mi fe debía ser de acción, no que yo me lanzo a una aventura sin mover un dedo, o esperando que las cosas se solucionen. Quería que mi corazón aprendiera a soportar las negativas, que quitara la verguenza o timidez, que aprendiera a aprovechar cada momento. Que esto era entre Dios y yo, que no dependia de la fe de mis padres, sino que era una nueva etapa. Yo nunca tuve que trabajar, por la gracia de Dios, antes de esto. Dios no me hizo faltar nada nunca y siempre proveyó. y agradezco tanto la oportunidad que Dios me dio de descubrir que puedo hacer algo.
Pero en esta historia mi aporte fue mínimo, como les mencione antes, me iba muy mal, pero mas de trienta personas anonimas fueron los inversionistas. Ellos, dieron de su dinero para que este proyecto se hiciera real, y no solo estuvieron que los que ofrendaron, sino los que oraron por Ucrania, mi viaje y mis necesidades, Me sorprendio muchisimo como tanta gente quizo ser parte de una forma u otra de esta travesia. Por eso se que nada de esto fue por voluntad humana, Dios estuvo en medio todo el tiempo. y como antes mencione, en esta victoria, el merito lo tiene mi general (mi hermoso DIOS, quien siempre supo el final de todo esto y me motivo a luchar) , sino también mis compañeros soldados, no solo los que lucharon y me ayudaron cada dia,sino los que oraron. El ejercito mas poderoso.
En Marzo todo esto parecia una locura, llegados a este punto puedo decir que Dios hizo un milagro.
Mi viaje esta a la puerta y aunque quisiera contarles tantas cosas, tal vez mas adelante lo haga.
Queda un día para mi partida...y aun no caigo!
Nunca duden de Dios, cuando El esta en medio, todo es mejor.
#CountDown #UcraniaAllaVoy #Travel #memories #Grace







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